Si encuentras un camino sin obstáculos, quizás no te lleve a ninguna parte
Siempre nos gusta guiarnos por blogs, opiniones, intuición… pero no todas las noches das en el clavo, esta vez dimos en todo el centro de la diana y acabamos en una cena con amigos en el restaurante de una celebrity en ciernes, Bache restaurante.
Lo que no sabíamos es que también descubriríamos la cocina de Alejandro Alcántara, un chef gaditano que ha crecido entre los fogones de cocineros con múltiples estrellas Michelin como Martin Berasategui o Eneko Antxa.
Conocido por el programa cocineros al volante, no era la primera ocasión que participaba en la pequeña pantalla ya que había hecho sus pinitos asesorando y dando consejos a los concursantes de programas como Masterchef. Algunos podréis pensar que ya está, el típico famoso que pone un restaurante y a forrarse, pero no es el caso, Alejandro ha conseguido una cocina de mucha calidad, original y de gran sabor en el barrio de Chamberí.
Situado entre Bilbao y Quevedo, Bache restaurante es un local no muy grande, de dos plantas, divido en diferentes zonas con capacidad para unos 60-70 comensales, de decoración alegre y cuidadoso con los detalles, doble puerta a la entrada para evitar en la medida de lo posible el frío que entra por la puerta en invierno o estufas en las mesas más cercanas a la entrada, hacen que desde un principio te sientas como en casa.
Para los más curiosos (lo que es nuestro caso), un consejo, llegad un poco antes de la hora y tomaos algo en la barra, podréis disfrutar de la pequeña cocina, donde el propio chef, va desarrollando, junto con su equipo, uno a uno los diferentes platos de la carta.
La carta se caracteriza por unas claras influencias del Sur, que parte de raíces gaditanas y que se deja influir por aires exóticos de oriente y Sudamérica, siempre manteniendo una cocina de mercado con productos de temporada, fiel a la cocina fusión.
Y lo mejor de todo, es que se trata de una carta con no muchos platos, viva, con platos que entran y salen todas las semanas, todo en medias raciones, ideales para compartir y aunque no es la más original, (croquetas, gyozas, tacos…) lo mejor sin duda es la calidad de sus platos, frescos, de gran sabor, con toques exóticos y en algún caso picantes que transforma la comida en toda una experiencia para los sentidos.
Y como casi siempre vamos con amigos, siempre nos preparamos para probar cuantos más platos mejor.
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| Croquetas de puchero |
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| Gyozas de carrillera |
Pueden parecer platos tradicionales, pero lo difícil es destacar entre lo tradicional. Todo el mundo puede hacerlos pero pocos pueden hacerlos especiales. O eso dice su abuela de las croquetas...
Mas bueno todavía, Tacos y sándwich japo-cubano.
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| Taco de pollito a la Pantoja |
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| Sándwich japo cubano |
Pero bueno ¿es que no va a haber riesgo esta noche? Tranquilos, vamos a por la oreja de cerdo con hummus de pera escalivada, no esta mal, ¿eh? Sin palabras.
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| Oreja con hummus |
Solemos ser un poco críticos con los postre porque es raro que te saquen del brownie y de la tarta de queso pero... Cremoso de chocolate picante con crumble y espuma de tomillo. En serio el primero bocado es algo que te transporta a otro lugar, eso si en el campo.
Yogurt con fruta de la pasión. ¡Ah! y pipas de calabaza caramelizadas.
Dos de los mejores postres que hemos probado.
Si todo esto lo acompañas con una sonrisa, un saludo en persona del chef, un ¿que tal, os ha gustado? hace de Bache un restaurante imprescindible en la vida gastronómica madrileña. Pero corre, puede que la semana que viene sean otros los platos que te sorprendan.
Nuestra BIGOTACIÓN:
Lo MEJOR: La comida, sin duda. Buena y sin pretensiones.
Lo PEOR: Aunque algunos lo veamos como un ventaja, la carta no es muy amplia.
Bache
Dirección: Calle Rodríguez San Pedro 2, 28015 MADRID
Teléfono: 918 289 588
Web: http://www.bacherestaurante.com
Precio: entre 20 y 30 euros por persona
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